miércoles, 26 de septiembre de 2012

Noticias frescas

 
Hay mucha maneras de dar una noticia como ésta y nosotros hemos escogido la nuestra. Para los padres hemos optado por aprovechar la excusa de un comida / cena,  y una vez nos asegurábamos de que no había ningún peligro alrededor en caso de colapso o desmayo les dimos un paquetito con una sorpresa (foto). Las reacciones fueron diversas… vueltas en plan peonza, gritos agudos, preguntas sin parar para confirmar, abrazos, besos, brindis y cuando todo parecía más tranquilo… más y más rágafas ametralladoras de preguntas: ¿Cómo? ¿De cuánto? ¿Qué? (nadie ha preguntado quién). Incluso carreras a por el teléfono “¿ya lo puedo contar?”. Noooo, aún nooo, deja que lo contemos nosotros!

Para los amigos ha sido más normal, hemos tenido 3 bodas seguidas así que la noticia se ha podido dar en grupo y así ahorarnos comentarios del tipo “me he enterado de que…”, “ me ha dicho un pajarito…”, “Anda, que se lo has dicho a… y mí no”, “Marica, no me habias dicho…”. Las reacciones son de lo más interesantes. Algunas de gran sorpresa pero sobretodo me quedaré con el comentario de un colega embarazado de 29 semanas: <<Los que no están embarazados se alegran y se quedan flipados pero los que realmente se quedarán alucinados son los que ya han hecho el checking anteriormente>>. Es así, estas parejas nunca le preguntarian a mi mujer “¿cómo le has convencido?”, o dirían como un colega al enterarse  “chaval disfruta de esta fiesta que es la última” en la barra libre de la boda; o incluso, éste se lleva la palma, “Tio, vete olvidándote de la vida nocturna, no te vayas a la cama aún que te quedan pocas fiestas como ésta…”.

Estamos empezando una nueva etapa y dar la noticia a tus seres más queridos es como abrir el telón a una nueva obra que durará toda la vida (peazo cursilada del día). Por fin se va extendiendo la noticia y muy pronto me tendré que ir acostumbrando a hablar en un plural extenso siempre (pasar del “ella y yo” a “nosotros 3”).

miércoles, 19 de septiembre de 2012

ECO ECO

 En la vida siempre hay una primera vez para todo (léase el título de este blog) y en mi caso fue ayer cuando entré por primera vez en la consulta de nuestra ginecóloga. Ya sé que muchas pensaréis, <<pues vaya cosa especial>>… pues sí, lo era y mucho. Mi mujer ya me estuvo explicando con pelos y señales con lo que me encotraría pero nada pudo prepararme con el primer momento: Se abre la puerta de la consulta y tachánnnn, Skakira y Piqué de la mano piiiiiiiiii, era broma… vayamos a cosas serias.

¿Cómo pueden caber 3 enfermera-secres en un espacio de no más de un metro detrás de lo que puede ser la barra de un bar? Cuantas más enfermeras-secres, ¿mejor es la gine? ¿Cómo cabían 3 teclados en esa mesa de recepción? Son muchas las preguntas que me hacía hasta que nos pasaron a la sala de espera con tropecientas sillas (muchas para dos salas de consulta) y todo un revistero de lo más entretenido: Hola, Lecturas, 10 minutos, Ser padres, Mi bebé, Padres, Mi bebé y yo, Todo papás, Tu jardín con Bebé, Casa-Bebé y Jardín, El Mueble-Bebé, Bebés y Más… ¿Cómo es posible? ¿Nadie ha tenido en cuenta de que allí van papás también? ¡¡¡Tampoco pido el Don Balón, pero almenos un diario para no quedarte dormido!!! Menos mal que nos llamaron enseguida.

Entramos y la doctora nos preguntó qué tal el embarazo etc etc etc y entonces vino lo mejor.  Ella se puso una bata de lo más sexy, con transparencias; la gine la conectó a una pantalla con un artilugio alargado, muuuuy alargado, con cámara,  poco convencional para que nos entendamos y allí fue cuando me di cuenta de que había valido la pena ir a la gine:  ¡¡¡El cuerpo de una mujer es blanco y negro por dentro!!! ¿A que nadie os lo habia dicho antes? Me aguanté las ganas de compartir el momentazo con Laura por que me imaginé que todo el mundo en aquella sala ya lo sabía. Después, la doctora con un rápido movimiento de mano enfocó lo que haría de verdad inolvidable ese día. Un garbancito muy pequeño, de 1,5cm y latiendo a toda fuerza con una energía que cuesta imaginar más pura, más limpia y más frágil. Ése era nuestr@ niñ@ que se encontraba reconfotablemente colocad@ en el útero blanco y negro de su madre. Las emociones no habían acabado ni mucho menos, de repente empezamos a oir latir ese corazón tan pequeño con un ritmo vibrante y lleno de significado: bumbum, bumbum, bumbum... Ahora sí nos empezamos a sentir más y más padres.
¡Y… ahora ya podemos contárselo a todo el mundo! ¡Estamos embarazados!

martes, 11 de septiembre de 2012

Hormoneando

Hace una semana que una palabra se ha interpuesto en nuestras vidas cuando en los 12 años que llevamos juntos había sucedido en muy pocas ocasiones: LAS NAUSEAS.
Las nauseas son causadas, a parte de por una resaca tamaño agujero de Bankia (no sería el caso), por un incremento en las hormonas de la madre.
Las nauseas pueden venir en cualquier momento y acompañadas o no de otros sintomas como el mareo y el sueño. Las nauseas son difíciles de explicar por que son como si te apretase el estomago con acidez, con o sin mareo, con hambre o con asco a la comida,  no tienen ni hora ni lugar y de duración indeterminada ( 5min o 1 día entero).
El otro día por la noche, tarde, me despertó una respiración arrítmica profunda de ella; medio dormido escuché como me contaba, leyendo del iphone, que las nauseas son síntomas de un buen embarazo y que un exceso de las mismas (mayor incremento hormonal) podría significar, atención, embarazo multiples… automaticamente, le lancé un beso, me di la vuelta, crucé los dedos tocando madera, coloqué la almohada y cerré los ojos.